Reducción de emisiones de CO2
Una de las principales ventajas de la movilidad sostenible es la reducción de emisiones de CO2, ya que promueve el uso de transporte público, bicicletas y vehículos eléctricos, lo que ayuda a disminuir la contaminación atmosférica y combatir el cambio climático.
Menor consumo de energía
La movilidad sostenible fomenta el uso eficiente de recursos y energía, promoviendo el uso compartido de vehículos, el uso de energías limpias y el desarrollo de infraestructuras sostenibles, lo que contribuye a reducir el consumo de combustibles fósiles y la huella ecológica.
Promoción de la salud
Al favorecer el uso de medios de transporte no contaminantes como la bicicleta o caminar, la movilidad sostenible reduce la exposición a contaminantes y mejora la calidad del aire, beneficiando la salud de las personas y reduciendo el riesgo de enfermedades respiratorias y cardiovasculares.