

El panorama medioambiental, a corto y medio plazo es desolador. La primavera y el otoño casi ni se notan, las temperaturas son cada vez más extremas, entre 10 y 20 volcanes entran en erupción a diario y el mar no para de subir, debido al deshielo. Nos estamos cargando el planeta y, de no hacer algo, no habrá vuelta atrás. En este sentido, el Día de la Educación Ambiental 2022 cobra más relevancia que nunca y te contamos el motivo.
Día de la Educación Ambiental 2022
Para empezar, el Día de la Educación Ambiental 2022 cumplirá 50 años desde su instauración. El 26 de enero de 1972 tuvo lugar la Conferencia de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente en la que se acordó que todos los países miembros aunaran esfuerzos para ayudar a salvar el planeta.

Foto: @granjasachaurco
Comenzaba la década de los 70 y el mundo ya se había dado cuenta que algo iba mal con el planeta. Medio siglo después, la situación es mucho peor y las medidas, mucho más acuciantes y necesarias.

Foto: @mateconiuios
Así, desde aquel 1972, todos los días 26 de enero se celebra el Día de la Educación Ambiental. El objetivo de esta celebración es, básicamente, cuidar el planeta antes de que la naturaleza tome medidas irreversibles. Obviamente, este objetivo se circunscribe en otras pautas mucho más asequibles pero igual de relevantes.
Objetivos del Día de la Educación Ambiental
El Día de la Educación Ambiental 2022 se plantea como el punto de encuentro donde poner en común ideas y planes para mejorar la salud del medio ambiente. Por tal motivo, cada año, se van sumando objetivos al Día de la Educación Ambiental 2022, con la confianza en que se hayan cumplido durante la Agenda 2030. A partir de ahí, se marcarán nuevas dinámicas.

Foto: @iespuertodelacruz
- Enseñar a la población qué es el medio ambiente y hacerles ver por qué son importantes en el binomio que conforma el ser humano con la naturaleza.
- Sentar las bases de una conciencia medioambiental y sostenible en las nuevas generaciones que heredarán el planeta en las condiciones que se lo dejemos.
- Promover la ayuda solidaria y desinteresada a los grupos sociales que trabajan, a diario, en los problemas ecológicos de su entorno más cercano.

Foto: @casamaquis
- Mostrar la realidad de la situación del planeta, del medio ambiente y las consecuencias de no cambiar el rumbo que está tomando (subida de temperaturas, elevación del nivel del mar, temperaturas extremas, volcanes activos, Filomenas…)
- Potenciar la participación ciudadana, no sólo en las iniciativas propuestas, sino en presentar sus propias ideas para mejorar la situación.
- Convencer a cada ciudadano que su aportación es importante y que muchos pequeños gestos, suponen un gesto cada vez mayor y necesario.

Foto: @goodkarmaprojects
La Agenda 2030 es la que marca el camino medioambiental a seguir por las Naciones Unidas y todos los países del planeta. El problema es que no todos lo cumplen y, en este caso, se debería ir todos a una y, hasta que el mundo no se ponga de acuerdo, la batalla contra el cambio climático y a favor del medio ambiente, comenzará con desventaja para la preservación de nuestro planeta. Queda mucho por hacer.
Contestar